Una cronología del camino que hemos recorrido
Caminos para el cambio Inc.
Establecimiento del programa de crisis por violación de Worcester
Pathways for Change, Inc. se estableció en 1973 como el Programa de Crisis de Violación de Worcester
Programa de Crisis de Violación de Worcester Incorporated
El Programa de Crisis de Violación de Worcester se incorporó en 1981.
Nuevo alcance, nuevo nombre
Ampliamos nuestros servicios para incluir más ciudades y cambiamos el nombre a The Rape Crisis Center of Central Massachusetts.
Se establece Pathways For Change, Inc.
Después de una profunda introspección, cambiamos nuestro nombre una vez más para reflejar nuestro renovado enfoque y dedicación a nuestra Misión.
Caminos para el Cambio, Inc. se estableció en 1973 como el Programa de Crisis de Violación de Worcester e incorporado en 1981.
En 1993, después de expandirnos más allá de la ciudad de Worcester a nuestra área de servicio actual (47 ciudades y pueblos en las áreas de Greater Worcester, Leominster/Fitchburg y Gardner), cambiamos nuestro nombre a The Rape Crisis Center of Central Massachusetts.
La Agencia reconoció en 2010 que las necesidades de nuestra comunidad para abordar este problema habían cambiado.
Luego de un período de introspección y encuestas a nuestros clientes y la comunidad, ta Agencia renació en agosto de 2011 como Caminos para el Cambio, Inc.. con un renovado enfoque y dedicación a nuestra Misión.
Con un largo historial de logros y un compromiso de llegar a las diversas comunidades dentro de Central Massachusetts, Pathways se enorgullece de ser uno de los principales centros de crisis por violación en Massachusetts y ha servido como un ejemplo de prácticas prometedoras a nivel nacional.
Desde que abrimos nuestras puertas en 1973, Pathways se ha comprometido con el desarrollo de servicios integrales para las comunidades dentro de nuestra área de servicio. Estos servicios incluyen intervención en crisis las 24 horas, grupos de apoyo, asesoramiento y defensa para sobrevivientes de agresión y abuso sexual, así como educación para la prevención, capacitación profesional y alcance comunitario.
Operamos desde un modelo de organización comunitaria, conscientes de que las soluciones reales a la violencia sexual deben involucrar una amplia gama de participación comunitaria. Esta es la filosofía subyacente de nuestro programa de voluntariado, así como de nuestro trabajo con vecindarios, organizaciones, iglesias, escuelas y colaboraciones con otras agencias. La organización comunitaria incluye brindar asistencia después de una agresión sexual y, al mismo tiempo, desarrollar la competencia de nuestra comunidad para prevenirla de manera proactiva y coordinada.